Felicitaciones a La Jornada: por sus
30 Años
Alrededor de
Chapultepec es posible observar una exposición fotográfica, titulada “Las fotos
de La Jornada: 30 años”, resultado de un esfuerzo conjunto entre la Secretaría
de Cultura y la Dirección del diario La
Jornada. A través de una serie de 120 fotografías se capturan momentos claves
de la vida nacional e internacional, escenas documentadas por reporteros de
este diario que han dado la vuelta al mundo y que retratan, entre otras cosas, el mundo cultural de
México y el arduo proceso de
democratización que hemos vivido como nación.
De
entre la serie sobresalen fotografías galardonadas: como la de Pedro Valtierra ganadora del Premio Rey
de España en 1998, en la que un par de indígenas chiapanecas empuja con toda su
fuerza a un soldado del Ejército mexicano. O la fotografía captada por Jesús Villaseca en 2004, justo en el
momento en el que el luchador social coreano Lee Kium Jae se inmola con una
navaja suiza en la Cumbre Internacional de Cancún.
Esta
exposición nos invita a recordar el contexto en el que surge el periódico La
Jornada y su gran aportación a la libertad de expresión y a la democratización
de nuestro país. Hace 30 años, el país vivía en un régimen autoritario, donde
existían pocos espacios críticos al gobierno, pues los medios de comunicación
eran controlados, reprimidos o cooptados con mecanismos de control tan sutiles
como el suministro de papel o la propaganda gubernamental y tan opresivos como
la incitación a huelgas, la violencia o la provocación de conflictos internos.
En ese contexto surge el 19 de septiembre de 1984, un periódico que logra reunir a
disidentes quienes, desde distintas trincheras, abogaron por un México más
plural, más tolerante, más democrático. El nacimiento de La Jornada fue posible
gracias al apoyo de diversas personalidades como: Rufino Tamayo, Francisco
Toledo, Gabriel García Márquez, Vicente Rojo, Francisco de la Vega y Alejandro
Gómez Arias, quienes apostaron por un medio independiente que diera voz a las causas
fundamentales de México.
A este núcleo original
de periodistas se sumaron científicos, académicos, escritores, artistas,
cineastas, fotógrafos, militantes políticos de varias tendencias y luchadores
sociales, quienes coincidían en construir un diario el plural que reflejara la
realidad de un país que ya no se reconocía en la unanimidad del régimen y que, como
nos cuenta Carmen Lira Saade (actual directora del diario) veía con alarma las
crecientes amenazas a las conquistas sociales.
La construcción de un
espacio alternativo de comunicación no fue fácil. La Jornada tuvo que sortear
diferentes problemas materiales, presiones políticas y retos financieros los
cuales pudieron superarse gracias a un amplio respaldo de sus lectores y de
estudiantes, obreros, amas de casa, profesionistas y campesinos quienes
contribuyeron como pequeños accionistas del diario. Desde entonces y hasta hoy –siendo
el segundo periódico de mayor circulación en el país- la Jornada ha jugado un
papel crítico a diferentes gobiernos. Su postura siempre ha sido clara: la
expresión de la diversidad social, la defensa de la soberanía, el seguimiento a demandas de la
sociedad civil, la autodeterminación de los pueblos, la redistribución de la
riqueza y la responsabilidad del Estado por asegurar mejores condiciones de
vida.
Por
todo ello quiero extender una gran felicitación a Carmen Lira Saade, directora del periódico, y a todos los
periodistas, editores, fotógrafos, moneros y colaboradores, que integran a este
gran equipo que logra cada día que una nota crítica, una caricatura mordaz o
una editorial reflexiva llegue a cada mesa de discusión, revitalizando la
libertad de expresión y la democracia de nuestro país. ¡Gracias a La Jornada
por hacerme el lector crítico que soy!